5 Técnicas de comunicación que debes tener con el cuidador de tu adulto mayor

Cuando confías el cuidado de un ser querido a otra persona, la comunicación efectiva se vuelve esencial. Esta comunicación no solo garantiza que el cuidador entienda y atienda las necesidades específicas de tu familiar, sino que también previene malentendidos, construye una relación de confianza, y facilita la resolución de problemas. Además, asegura que el cuidado proporcionado sea continuo y adaptado a los cambios que puedan surgir en la situación. Mantener una comunicación abierta y clara es clave para que tu ser querido reciba el mejor cuidado posible.

A continuación, te presentamos cinco técnicas esenciales para mantener una comunicación efectiva con el cuidador de tu adulto mayor, ayudándote a establecer una relación sólida y colaborativa.

Una comunicación efectiva comienza con claridad. Según la American Psychological Association (2021), es importante que tanto la familia como el cuidador comprendan cuáles son las expectativas y responsabilidades de las cuales deberá encargarse la persona a l cuidado desde un inicio.

Al contratar a un cuidador, discute en detalle las necesidades específicas de tu adulto mayor, como las rutinas diarias, los requerimientos médicos, y las preferencias personales. Definir claramente los roles y responsabilidades ayuda a evitar malentendidos y asegura que todos estén en la misma página.

Consejo: Crea una lista de tareas y expectativas que puedas revisar regularmente con el cuidador. Esto ayuda a mantener el enfoque en lo que es más importante para el bienestar de tu ser querido.

La escucha activa es fundamental para construir una buena relación con el cuidador. Según la Mayo Clinic (2020), escuchar atentamente sin interrumpir y haciendo preguntas para aclarar dudas demuestra que valoras la opinión y el trabajo del cuidador. Esta técnica también permite detectar posibles problemas o preocupaciones antes de que se conviertan en conflictos mayores.

Consejo: Dedica tiempo para tener conversaciones regulares con el cuidador donde ambos puedan compartir sus puntos de vista y preocupaciones. Asegúrate de que estas conversaciones sean en un ambiente relajado, sin prisas.

La comunicación no debe ser solo al inicio de la relación laboral. Es vital mantener un canal de comunicación abierto y continuo. Según el National Institute on Aging (2022), las reuniones periódicas, ya sean semanales o mensuales, permiten evaluar cómo va el cuidado, discutir cualquier cambio en las necesidades del adulto mayor, y ajustar las expectativas si es necesario.

Consejo: Establece un método de comunicación que funcione bien para ambos, como llamadas telefónicas, mensajes de texto o correos electrónicos, para mantener una conexión constante.

Es natural que surjan desacuerdos, pero lo importante es cómo se manejan. Según la revista Psychology Today (2021), enfrentar los conflictos de manera constructiva y con respeto es esencial. Si surge un problema, abordarlo lo antes posible, centrando la conversación en los hechos, las oportunidades de mejora y no en las emociones negativas que se pueden sentir en base a la situacion. Proporciona retroalimentación específica y sugiere soluciones en lugar de señalar solo los problemas.

Consejo: Cuando hables sobre un problema, utiliza el enfoque de "Yo siento" en lugar de "Tú haces", para evitar que la otra persona se sienta atacada. Por ejemplo, "Yo siento que necesitamos mejorar la comunicación sobre las horas de medicación" es más efectivo que "Tú nunca sigues las instrucciones".

Todos agradecemos que nuestro trabajo y esfuerzo sea reconocido y sobre todo valorado cuando se trata de estar al cuidado de alguien más. Agradecer la labor de un cuidador hace la diferencia en la comunicación efectiva.

Un estudio publicado en el Journal of Gerontological Nursing (2020) muestra que los cuidadores que se sienten apreciados son más propensos a estar comprometidos y a proporcionar un mejor cuidado. Un simple "gracias por tu dedicación" o reconocer cuando han hecho un buen trabajo puede fortalecer la relación y mejorar la calidad del cuidado.

Consejo: Expresa tu gratitud de manera regular, ya sea con palabras como “estamos muy agradecidos”, “notamos tu dedicación”, una nota de agradecimiento o un gesto pequeño pero significativo, como ofrecer un descanso adicional o un pequeño obsequio.

Mantener una comunicación abierta y efectiva con el cuidador de tu adulto mayor es esencial para asegurar que su cuidado sea el mejor posible. Al establecer expectativas claras, practicar la escucha activa, mantener una comunicación continua, manejar los conflictos constructivamente, y mostrar aprecio, puedes construir una relación de confianza y colaboración que beneficiará a todos los involucrados.